Con estos 10 consejos para escribir tu propio libro que nadie te ha dado antes quiero empezar una serie de artículos que os ayuden a explotar vuestra propia vena creativa. Unos artículos concebidos para que no os dejéis amilanar por todos esos vampiros emocionales que os repetirán hasta la saciedad que no podéis escribir porque no tenéis suficiente talento.
Espero contribuir con estos 10 consejos para escribir, a que os lancéis a la dura arena de la hoja en blanco sin complejos. Sólo me queda comentaros que, aunque están concebidos desde el punto de vista de la escritura de ficción, podéis aplicarlos con pocas modificaciones a todo tipo de obras.
Vamos a ello:
- Apuesta por tus ideas.
Lo más difícil para un escritor en siempre concebir la idea de lo que quieres escribir. En este punto te aconsejo no dejarte llevar por las tendencias o modas. Si una idea te parece interesante, no lo dudes, desarróllala, aunque no se trate de una idea líder en tendencias en tus redes sociales. Los gustos, tendencias y modas son variables y, si intentas amoldarte a ellos sin convencimiento, serás zarandeado como una hoja al viento. - Escribe lo que te gustaría leer.
Como ayuda para concebir la historia que quieres relatar, piensa en aquello que te gustaría leer. No sólo eres el autor de tu obra, también su primer lector. No lo olvides nunca. - Obsesiónate.
Normalmente la obsesión no es algo demasiado recomendable, pero cuando concibes una trama, si no te sumerges en ella completamente, no serás capaz de hacer que tus lectores lo hagan. Vive tu propia historia mientras la escribes. - Documéntate.
Por mucho que conozcas un tema o determinadas situaciones, no eres un genio. Asume que hay muchas cosas que no sabes. Cuanto más te documente más auténtica y real será tu obra. - Lee.
Puede parecer un consejo extraño, pero por experiencia se que, el centrarse en escribir una obra, puede hacer que descuidemos nuestras lecturas habituales. Esto es un terrible error. Más allá de todos los cursos de literatura que hagas, leer es lo que de verdad te enseñará a escribir. No descuides la lectura. - Copia.
Escribir no es hacer un examen. Copiar está permitido y, por supuesto, no me refiero a que plagies la obra de otro escritor. Me refiero a que no deben dolerte prendas en copiar cómo otros autores resuelven los problemas a los que te enfrentarás durante la escritura de tu obra. ¿Cómo estructurar un diálogo complejo? ¿Cómo caracterizar un personaje secundario? ¿Cómo describir una localización? Te surgirán preguntas que puedes solucionar leyendo y copiando las soluciones que otros autores han dado antes que tú a los mismos problemas. - Esquematiza sin abusar.
Utiliza esquemas para organizar tus ideas. Aunque el ordenador es el mejor aliado actual de un escritor, el boli y el papel siguen siendo imprescindibles. Realiza esquemas de la trama, de los personajes, de las localizaciones y de todo aquello que creas necesitar. Eso sí, tampoco intentes esquematizar toda la obra, deja que tu imaginación vuele durante la escritura y no dudes en incumplir tus propios esquemas, si la historia te lo pide. - Da libertad a tu historia.
Abundando en el punto anterior, te darás cuenta de que llega un momento durante la realización de tu obra en que ésta toma vida propia. Sobre todo, si se trata de un relato largo o una novela, empezarás a tener la sensación de ser un espectador más de la historia. Los personajes empezarán a demandar comportamientos e incluso se provocarán situaciones que no había previsto en tu idea inicial. Deja que los personajes vivan por sí mismos, aunque, por supuesto, no pierdas el control de tu historia. - No seas tu propio crítico literario.
Durante le escritura de tu obra, la leerás una y mil veces corrigiéndola e intentando mejorarla. Sin embargo, no debes ser demasiado duro contigo mismo. Corres el riesgo de desanimarte porque creas que no lo estás haciendo lo suficientemente bien. Deja que otros hagan de críticos literarios, tú solo escribe y hazlo lo mejor posible. Poco a poco irás mejorando y te sorprenderás del resultado. - Termina lo que empiezas.
De todos mis consejos quizá éste sea el más importante. Cuando uno empieza a escribir es normal comenzar mil relatos, para abandonarlos sin llegar a pasar de unas pocas páginas de escritura. Esto pasa porque no confiamos en nuestras propias capacidades y la inseguridad nos vence. Si tienes una idea, llévala hasta el final. Termina tus relatos, aunque no te satisfaga del todo el resultado. No sabes lo valioso que puede ser con el tiempo repasar esos relatos iniciales y ver tu propio progreso. Además, igual entre esas ideas que descartaste, con el tiempo encuentres una gran obra esperando a que la escribas.
Con esto es suficiente por hoy, pero prometo volver asiduamente con más artículos, para que tengáis cada vez más recursos para lanzaros al mundo de la escritura.
Elena
Muy buenos consejos. Yo decidí este año dedicarme a terminar novelas empezadas por mucho que me costase porque al final las buenas acababan abandonadas. También he comprobado que las épocas en las que más leo soy más proclive a escribir. Pero sin duda de todos los consejos el más difícil es no ser tu crítico.
JCBoiza
Merece la pena terminar lo que uno empieza. Después de terminar tus novelas, déjalas reposar un mes o dos sin pensar ni siquiera en ellas. Luego repásalas de principio a fin y reescribe y elimina lo que no te guste, verás como tus obras mejoran enormemente. Suerte y me cuentas.